Tipos de magos

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tipos de magosEn el mundo hay mucho más de lo que podemos ver con nuestros propios ojos. Esta tesis atraviesa el pensamiento occidental desde que Anaximandro postulara la existencia del ápeiron, una especie de entidad abstracta, indetermina e indefinida, la cual era el principio de todo. Después de la postulación de esta entidad, otros vinieron y siguieron hablando de otras entidades que no se pueden ver ni saborear ni tocar ni oír ni oler, es decir abstractas. Sin ir más lejos, Descartes suponía que la mente era entidad inmaterial distinta del cuerpo esencialmente. De este modo, parece evidente que podemos creer en la existencia de una realidad que nos es oculta, que se sitúa más allá de lo que nuestro sensorio puede traernos a la conciencia.

Muchas personas son las que se dedican a trabajar en estos asuntos, a lo que suelen llamar, si no se hace desde una facultad de filosofía, física teórica, lingüística, matemáticas, etc., esotérico o paranormal. A continuación presentaremos algunos perfiles profesionales típicos desde este punto de vista.

Videntes

La videncia es un arte muy antigua, tanto que se remonta a la aparición de la humanidad. Y es que existen videntes de nacimiento, es decir, personas que tienen dicha habilidad de forma innata. Por ello, si en la actualidad nacen seres humanos con el don de la videncia, es de suponer que en el pasado también nacían.

Dentro de este grupo entra una amplia categoría de profesionales que se dedican al conocimiento de la realidad oculta en la vida de las personas. Mediante innumerables medios, tales como el tarot, la baraja española, la bola de cristal, las runas, etc. son capaces de conocer qué piensa alguien, el pasado, presente y futuro relativo a una persona o a un hecho, institución, etc.

Además de este tipo de videntes, están los que lo son de nacimiento. Algunos dicen recibir sus mensajes de un ángel o de una deidad, otros poseen el don de la clarividencia y no creen hablar con ninguna entidad postulada por alguna religión particular.

Espiritistas 

El harte de comunicarse con los difuntos es 100 % de nacimiento. No se puede aprender a hacerlo, uno no se hace espiritista, se nace así. En este caso, los espiritistas pueden ver a los espíritus y hablar con ellos. Con la práctica pueden incluso llegar a invocarlos. Son profesionales muy útiles si lo que queremos es contactar con algún difunto, con quien tenemos cuentas pendientes.

Pero en la tarea en la que más destacan los espiritistas es cuando vivimos en una casa encantada, en la que habitan presencias espirituales que, de alguna manera, tras su muerte su destino en el más allá quedó entrelazado al edificio. En efecto, los espíritus suelen ser entidades que responden a los estados psicológicos de las personas que eran en vida, a sus recuerdos, su idiosincrasia, sus manías, etc. De este modo ocurre que estos pueden quedar unidos al lugar en el que vivieron.

Una espiritista puede comunicarse con estos espíritus, a los que el saber popular llama almas en pena. Una vez hablan con ello pueden incluso llegar a un tipo de acuerdo para que el espíritu en cuestión no moleste a los propietarios terrenales del edificio.

Nigromantes

La nigromancia se parece al espiritismo, pero no es lo mismo. No obstante, existen muchos espiritistas que acaban cayendo en las garras de este arte arcano y oscuro. Se trata de un tipo de magia que sirve para invocar y dominar espíritus, que muchas veces utiliza cadáveres. Este tipo de magia, lo repito, se puede aprender, aunque las personas que nacieron con el don de comunicarse con los espíritus tienen mayor facilidad para interiorizarla y utilizarla. No obstante, en muchos casos tienen que aprender a leer en lenguas clásicas, tales como el griego, el latín y el hebreo, en las cuales se escribieron los grimorios que ocultan esta negra sabiduría.

Brujas blancas

Distinguiremos aquí a las brujas o brujos negros de los blancos, pero no en términos raciales, sino en términos del tipo de magia que practican. Los brujos o brujas blancas son las que practican magia blanca. Se trata de personas que conocen la magia blanca, las cuales combinan, en muchas ocasiones, con conocimientos de acupuntura, santería, técnicas de relajación, naturopatía, homeopatía, etc.

En muchas ocasiones también aprenden a utilizar algunas técnicas adivinatorias, tales como la baraja del tarot, las runas, la bola de cristal, etc. También son muy dadas a estudiar la astrología.

Las personas que se dedican a la magia blanca suelen ser grandes profesionales en sus facetas de astrólogas, videntes y curanderas.

Brujas negras

Tal y como he dicho antes, las brujas o brujos negros se dedican a la práctica de la magia negra. La magia negra es un tipo de magia que sirve para manipular la realidad en función del capricho del hechicero particular. Es la magia que hay detrás de los conocidos males de ojos. Al igual que ocurre en el caso de los nigromantes, la mayoría de los magos negros son buenos lectores de lenguas clásicas, algo que es necesario, pues lo secretos de la magia negra están ocultos en arcanos grimorios escritos en el pasado.

Los brujos y las brujas negras tienen un amplio abanico de intereses, que van desde la videncia, la cual utilizan para perseguir a sus víctimas, hasta la nigromancia y la astrología.

Astrólogos

Aunque estrictamente hablando los astrólogos no se dedican a la magia, ni hacen magia, merecen que les dediquemos algunas palabras en este artículo. Los astrólogos son, en realidad, estudiosos de los astros y de su influencia en las personas, desde un punto de vista, sobre todo, psicológico. En la antigüedad, los astrólogos eran considerados científicos, duchos en matemáticas, astronomía y física. Hoy en día son vistos como consultores y tienen grandes conocimientos, en general, de tarot, de videncia con baraja española, sobre la bola de cristal, etc.